Sóis ya mi familia: conclusiones y sensaciones del Congreso FEAPA

Volvemos a nuestra rutina después de semejante terremoto de sensaciones y emociones. El I Congreso Nacional de Arteterapia en nuestro país ha resultado, bajo mi punto de vista, un éxito absoluto en cuanto a participación y a buenas intenciones en relación a aunar criterios para el futuro de la diciplina. Ya tenemos federación, ésta es la primera de las conclusiones, y mucho antes de lo que cabía esperar y de lo que muchos esperaban. ¿Alguien más se emocionó cuando, durante la presentación de la FEAPA el primer día, Mónica Cury leyó en nombre de todos la definición de la disciplina? Yo, desde luego, sí, y mucho. Cuánto tiempo hemos esperado... Carles Ramos, en su intervención, al igual que Paco Coll, dijeron que éste significaba un momento histórico, un antes y un después, puesto que por primera vez vamos todos a una. Muchos, cuando seamos viejitos, nos acordaremos de aquel enuentro en Girona, ciudad mágica, acogedora, como perteneciente a otros tiempos de ensueño. Queda mucho por hacer, dijeron muchos, y lo sabemos, pero también hemos hecho ya mucho. Hoy, que aún sigo emocionado, no puedo sino agradecer a todos aquellos que me han enseñado. A Mercedes Gysin y a Mónica Sorín, con quien compartí el descubrimiento de mi vocación, a Paco Coll, quien será siempre un padre y un guía para todos, a Montse Omenat, por ser mi modelo número uno, a Miquel Izuel por su esfuerzo; a mis compañeras y compañeros de formación, especialmente a las arteterapeutas Sonia Santana, Araceli Guiote y Mariantonia Hidalgo, y a las nuevas amistades que serán ya enternas, a la arteterapeuta Anna Freijomil. No sé vosotros y vosotrayo me siento parte de algo histórico. Esta ha sido la mayor de las inyecciones. Hoy y más que nunca, no estamos solos, tenemos una familia. Somos una familia. Sóis ya mi familia.